ENCUENTRO ELISENSE - VILLA ELISA - 04-07-2011
Lista Nº 525
- “ENCUENTRO ELISENSE”
COMUNICADO DE PRENSA – Encuentro Elisense
Villa
Elisa, 03 de Julio de 2011.
Aniversario
del fallecimieto de Don Hipólito Yrigoyen
En Buenos Aires, el 3
de Julio de 1933 fallecía Don Hipólito Yrigoyen, el primer Presidente elegido por
el sufragio popular.
Participó de la
creación de la Unión Cívica
y de la Unión Cívica
Radical. Impulso la idea movimientista del partido y desde la Provincia de Buenos
Aires organizó y participo de todas las gestas revolucionarias contra el “régimen falaz y descreído”. La abstención
patriótica y la lucha armada fueron las herramientas que junto a las ideas
antiacuerdista lograron en 1912 la sanción de la
Ley Sáenz Peña, que posibilitó el voto
popular y el final del fraude, la proscripción y la persecución política.
“Yrigoyen encarnó un sentimiento nacional de pureza y decencia cívica,
un movimiento de conciencias, de corazones y de almas dispuestos a pelear el
buen combate. Para ello era menester asumir una conducta ética en la que los
medios se subordinen a los fines y fueran congruentes con ellos”. Por: DIEGO ALBERTO BAROVERO – Instituto Irigoyeneano.
Su acción política pone
el acento en lo ético y en su proyecto “reparador”.
Durante sus dos
gobiernos se crearon más
de 3 mil escuelas, descendió el analfabetismo del 20% al 4% y se impulsó la Reforma Universitaria.
Fundó Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF). Sentó las bases de la Marina Mercante
nacional. Proyectó la creación del Banco Agrícola y el Banco de la República. Impulsó
las primeras leyes de previsión social. Fomentó la investigación científica
mediante la creación de los institutos de la nutrición, del petróleo y del
cáncer. En las relaciones internacionales ejerció la
defensa de nuestra dignidad nacional, de la autodeterminación de los pueblos y
fomentó la confraternidad americana y mundial. Al momento de su derrocamiento, en
septiembre de 1930, el producto bruto de nuestro país era el 50% de toda
Latinoamérica.
Por esto Yrigoyen permanece en la tradición y cultura
cívica argentina. Porque demostró que era posible crear una sociedad en la que los hombres fueran sagrados para los hombres
y los pueblos sagrados para los pueblos.
Como dijo el poeta, Yrigoyen será siempre “Un
espanto de tiranos y una redención de pueblos” (Arturo Capdevila).
Prensa
Encuentro Elisense