Ley de Etica Pública: López quiere respeto a la división de poderes.
El senador López precisó que la ley de Etica Pública sufre algunas modificaciones y le dijo a los funcionarios que se la reclaman que "cuando se habla de ética, también se habla del respeto a la división de poderes".
El senador Mariano López (PJ-Colón) explicó que el proyecto de ley de Etica Pública es sometido a una serie de modificaciones por lo que no pudo asegurar cuando será tratado en el recinto de la cámara alta. “Cuando se habla de ética, también hablamos de respetar los poderes. Que el funcionario haga lo que tiene que hacer y deje a los legisladores que hagan lo que tengan que hacer”, dijo en alusión al reclamo del titular de la oficina de Anticorrupción que le exige la sanción del proyecto.
López dijo que el proyecto de ley de Etica Pública que el Poder Ejecutivo remitió a la Legislatura en noviembre está sujeto a “una serie de modificaciones” y precisó a RecintoNet que ellas están vinculadas a “temas que no están contemplados” en la iniciativa.
Por eso, no pudo precisar en qué tiempo el Senado podría darle media sanción al proyecto, tal como lo reclamó públicamente el titular de la Oficina Anticorrupción, Luis Pedemonte. Sin embargo, advirtió que “cuando se habla de ética, también hablamos de respetar los poderes. Hablamos de la división de poderes. Que el funcionario haga lo que tiene que hacer y deje a los legisladores que hagan lo que tengan que hacer” sentenció López en una clara respuesta al pedido mediático de Pedemonte.
El 22 de julio, Pedemonte había dicho a diario UNO que la oficina que conduce elaboró su plan de acción 2007/2008 “con la limitación de no contar todavía con la Ley de Ética Pública”. Y agregaba: “Este plan es parte de un proyecto “más ambicioso”, que consiste en el diseño de un Plan Estratégico, que es otra de las sugerencias del organismo nacional para aumentar la transparencia, que prevea la definición de objetivos y metas para el mediano y largo plazo.
“Sin embargo –afirma Pedemonte– no es posible elaborar un Plan Estratégico si no contamos todavía con la Ley de Ética Pública”.
“Este paso institucional (Ley de Ética Pública) se convierte, entonces en el objetivo indispensable de corto plazo para poder proseguir y profundizar la política de Estado que nació con la creación de la Oficina Anticorrupción y Ética Pública inserta dentro de un sistema de control conformado por Fiscalía de Estado, Tribunal de Cuentas, Contaduría General de la Provincia, Legislatura, Poder Judicial, medios de comunicación, sociedad civil y partidos políticos”, agrega.
Una vez que se dé este demorado paso, se asegura que la Provincia “podrá contar con un organismo especializado en ética pública, con la independencia y estructura presupuestaria necesaria para velar por el control y publicidad de las declaraciones juradas patrimoniales y de los conflictos de intereses, así como diseñar e implementar los programas de prevención de la corrupción, acceso a la información y participación ciudadana, y presentar denuncias y constituirse como parte querellante en el proceso que corresponda”.
El senador Mariano López (PJ-Colón) explicó que el proyecto de ley de Etica Pública es sometido a una serie de modificaciones por lo que no pudo asegurar cuando será tratado en el recinto de la cámara alta. “Cuando se habla de ética, también hablamos de respetar los poderes. Que el funcionario haga lo que tiene que hacer y deje a los legisladores que hagan lo que tengan que hacer”, dijo en alusión al reclamo del titular de la oficina de Anticorrupción que le exige la sanción del proyecto.
López dijo que el proyecto de ley de Etica Pública que el Poder Ejecutivo remitió a la Legislatura en noviembre está sujeto a “una serie de modificaciones” y precisó a RecintoNet que ellas están vinculadas a “temas que no están contemplados” en la iniciativa.
Por eso, no pudo precisar en qué tiempo el Senado podría darle media sanción al proyecto, tal como lo reclamó públicamente el titular de la Oficina Anticorrupción, Luis Pedemonte. Sin embargo, advirtió que “cuando se habla de ética, también hablamos de respetar los poderes. Hablamos de la división de poderes. Que el funcionario haga lo que tiene que hacer y deje a los legisladores que hagan lo que tengan que hacer” sentenció López en una clara respuesta al pedido mediático de Pedemonte.
El 22 de julio, Pedemonte había dicho a diario UNO que la oficina que conduce elaboró su plan de acción 2007/2008 “con la limitación de no contar todavía con la Ley de Ética Pública”. Y agregaba: “Este plan es parte de un proyecto “más ambicioso”, que consiste en el diseño de un Plan Estratégico, que es otra de las sugerencias del organismo nacional para aumentar la transparencia, que prevea la definición de objetivos y metas para el mediano y largo plazo.
“Sin embargo –afirma Pedemonte– no es posible elaborar un Plan Estratégico si no contamos todavía con la Ley de Ética Pública”.
“Este paso institucional (Ley de Ética Pública) se convierte, entonces en el objetivo indispensable de corto plazo para poder proseguir y profundizar la política de Estado que nació con la creación de la Oficina Anticorrupción y Ética Pública inserta dentro de un sistema de control conformado por Fiscalía de Estado, Tribunal de Cuentas, Contaduría General de la Provincia, Legislatura, Poder Judicial, medios de comunicación, sociedad civil y partidos políticos”, agrega.
Una vez que se dé este demorado paso, se asegura que la Provincia “podrá contar con un organismo especializado en ética pública, con la independencia y estructura presupuestaria necesaria para velar por el control y publicidad de las declaraciones juradas patrimoniales y de los conflictos de intereses, así como diseñar e implementar los programas de prevención de la corrupción, acceso a la información y participación ciudadana, y presentar denuncias y constituirse como parte querellante en el proceso que corresponda”.
Fuente: Prensa Senador Mariano Lopez.
Fecha de publicación: lunes 6 de agosto de 2007 a las 23 horas.
